Fortaleciendo la salud y los derechos sexuales y reproductivos en América Latina y el Caribe
La salud y los derechos sexuales y reproductivos ocupan un lugar central en las decisiones más importantes que tomarán todas las personas, y particularmente las adolescentes, en el transcurso de sus vidas.
Aproximadamente la cuarta parte de la población de América Latina y el Caribe, equivalente a casi 237 millones de personas, tiene entre 10 y 24 años de edad.
Cuando las personas jóvenes están empoderadas mediante la educación sexual integral y el acceso a servicios de salud reproductiva para tomar decisiones acerca de sus vidas y de sus cuerpos, los impactos son significativos:
- Cuando la atención y la educación en salud sexual y reproductiva se brindan sin eufemismos, de manera integral, y basándose en los hechos se logra promover actitudes positivas, respetuosas y responsables frente a la sexualidad y las relaciones.
- Esto también permite que las personas jóvenes descubran que es posible vivir experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de coerción, discriminación y violencia.
- Para todas las personas jóvenes, y especialmente para las mujeres, tener acceso a información y servicios de salud sexual y reproductiva habilita la libertad de decidir en forma responsable si van a tener descendencia o no, cuándo, con quién y con qué frecuencia.
El desafío
Pese a los esfuerzos significativos que se han llevado adelante, América Latina y el Caribe tiene la segunda tasa más elevada del mundo en cuanto a embarazos adolescentes en jóvenes de 15 a 19 años. Es la única región del mundo en la que estas cifras están aumentando, sobre todo entre las jóvenes menores de 15 años.
Esta tasa elevada de embarazo adolescente se ve agravada por la falta de conocimientos acerca de la salud y los derechos sexuales y reproductivos, las normas de género que perjudican la capacidad de decidir y el acceso limitado a instituciones y servicios de salud.
Sumados a las actitudes negativas hacia el sexo y la sexualidad, estos factores conducen a resultados no deseados como las infecciones de transmisión sexual, los embarazos no planificados y los abortos realizados en condiciones inseguras.
Las repercusiones de estos resultados se extienden más allá de la adolescencia y contribuyen a perpetuar ciclos intergeneracionales de pobreza, exclusión y vulnerabilidad.
Nuestras acciones
El proyecto Derechos desde el Inicio emplea enfoques feministas y de derechos humanos para promover e impulsar la educación integral en sexualidad, la salud y los derechos sexuales y reproductivos.
Trabajamos en colaboración y alianza con movimientos de sociedad civil, liderazgos comunitarios, docentes, personas que se dedican a la investigación, personal de salud, personas que toman decisiones políticas y diferentes grupos poblacionales de Bolivia, Ecuador, Guyana, Perú y Canadá.
Estamos trabajando para garantizar prestaciones, promoción y avances en salud y derechos sexuales y reproductivos para mujeres, hombres y personas jóvenes, especialmente con las adolescentes.
Queremos que todas las personas en todas partes estén empoderadas para tomar decisiones libres e informadas que sean adecuadas para ellas.